Maniquí intervenido con lienzo recuperado, y pintado. Las tiras que componen la sobrefalda se disponen para ser intervenidos con textos de los observadores. Objeto/ instalación.Las texturas sobre el objeto, los pliegues, los colores elegidos, refieren a las heridas de la vida, a los dolores, a los remiendos necesarios; y - paradójicamente - también son resiliencia, son empatía, son sincera sabiduría. La falta de definición en el rostro aduce a la igualdad, no solo en posibilidad de estar sanos, sino también a no estarlo. Pero, fundamentalmente la abundancia del blanco simboliza la luz, la entrega y la energía necesaria para vivir la vida que tenemos, cada día.