Habiendo transcurrido más de la mitad de lo que se estima el tiempo ha vivir, me encuentro hoy concentrando energía en la docencia particular a través de cursos y seminarios y en la producción personal de obras que conjugan todo lo aprendido en mi recorrido.
Esculturas, grabados, cerámicas y papel hecho a mano, todo confluye en el espacio del taller para hacer visible lo desconocido. Desde mis ancestros fenicios, la racionalidad occidental y sentirme profundamente latinoamericano, surgen objetos e imágenes sin pretenciones, que no requieren más explicación que la de mirarlos y tomarlos tal como son.